A pesar de que su uso no deja de aumentar, los smartphones siguen siendo dispositivos potencialmente peligrosos. ¿Recordáis el tiempo en el que los teléfonos móviles todavía no se quedaban pegados a las manos? Esta época parece surrealista, tanto el confort de aquellos pequeños aparatos se nos ha vuelto indispensable.
Y la tendencia no debería bajar en los próximos años. Pero pasarse horas cada día pegado a una pantalla, los dedos pegados a un teclado, tiene forzosamente consecuencias negativas sobre la salud.
Los ojos
Un uso excesivo de celulares y de pantallas en general impacta en el cristalino del ojo y favorece la miopía. Peor aún, se han dado casos de personas que sufren ceguera temporal durante varios meses por culpa de este mal hábito. En estos casos se trataba de personas que continuamente comprobaban su teléfono por la noche en la cama, con un solo ojo, puesto que el otro estaba tapado por la almohada, puesto que se encontraban tumbadas sobre un costado. Esta diferencia de luz provocó una asimetría y la pérdida de visión. Para evitar este problema, conviene mirar la pantalla con ambos ojos.
El sueño
Uno de los efectos que ha sido demostrado en varias ocasiones es que el uso del móvil puede afectar el sueño. El reloj biológico se basa en la luz, la exposición a las pantallas por la noche puede provocar insomnio o dificultades para dormir. Para garantizar la calidad del sueño, conviene a pagar los aparatos electrónicos una hora y media antes de irse a la cama.
El cerebro
Se trata de un debate que interpela a la comunidad científica desde hace años. La cuestión nociva de las ondas electromagnéticas, y particularmente su relación con la aparición de ciertos tipo de cáncer de cerebro ha sido analizado por varios equipos de investigadores.
En los resultados publicados los científicos explican haber observado un aumento importante del cáncer de cerebro y del corazón en ratas que habían sido expuestas de forma intensa a las ondas de diferentes potencias. El riesgo de glioma, un tipo de cáncer de cerebro particularmente agresivo, se habría multiplicado por dos en los usuarios intensivos del celular.
El cuello
Este problema concierne en particular a los adolescentes. Mantenerse curvados hacia adelante es muy malo en periodo de pleno crecimiento y puede provocar dolores cervicales asociados a tensiones o a contractura a nivel de la nuca. Los médicos que han detectado un aumento de este problema relacionado con una mala postura lo han bautizado como «text-neck».
Los dedos
Las personas dependientes de los mensajes o del whatsapp no lo saben seguramente, pero el movimiento de los dedos sobre el teclado del celular puede provocar tendinitis, concretamente en el pulgar. Al igual que en el caso de la consola en los videojuegos, repetir siempre el mismo gesto durante horas no es bueno para los dedos. Este tipo de afección, más corriente de lo que se piensa puede causar mucho dolor, especialmente si no se trata a tiempo.